Bueno, un mes después de mi operación las previsiones se cumplen y no puedo ser mas optimista para lo que me espera. El viernes tuve la revisión con la dietista y mi cirujano y la verdad todo va genial. Un pequeño hematoma que tenia en una cicatriz se reabsorvio, con lo cual no hay que vaciarlo, menos mal. Ya puedo comenzar a introducir los solidos poco a poco, así que estas navidades al menos podre comerme medio langostino, jeje, las cantidades siguen siendo pequeñas pero es un alivio dejar atrás los purés y calditos, aunque sigo tomándolos por puro placer, pero ya a mi gusto, no tipo papilla de bebe. Y por fin me dio vía libre para comenzar a hacer deporte y darme masajes drenantes para la elasticidad de la piel y todas esas cosas que hacemos las mujeres. De momento puedo comenzar por andar y hacer natación, pero las maquinitas y clases dirigidas tendrán que esperar todavía un mes. Bueno y lo mas importante los kilos perdidos: desde que comencé con la dieta en agosto han sido un total de tachannnnnnnnn ¡¡¡34 kilazos!!! Si, si, como leéis, 34 pesos pesados que me quito de encima, 34 razones para seguir adelante, 34 ilusiones que me quedan aun por cumplir.
Cuando pienso en como estaba hace un años por estas fechas no puedo creer el vuelco que ha dado mi vida. Las pasadas navidades ni siquiera hubo celebraciones, era una época muy mala, necesitaba dar un cambio radical en mi vida en todos los sentidos, necesitaba centrarme en otras cosas que no fuera la desesperación de ser madre biológica a toda costa, la desesperación de ver como tu cuerpo y tu mente se va deteriorando en cada pinchazo, en cada prueba, en cada desilusión mensual. En el 2008 he tomado dos de las grandes decisiones mas importantes en mi vida: la adopción y operarme. Son dos claves en las cuales se a ciencia cierta que mi mente y mi físico van a cambiar. No hay la una sin la otra, lucho por ser feliz y por ser una persona sana, lucho por mi hijo, lucho por mis sueños y esto será clave para que el día de mañana pueda correr y jugar con mi pequeño. Este año es diferente. Lo compartiré todo con la gente que mas quiero, lo viviré junto a ese pequeño diablillo que el destino quiso cruzar en nuestras vida un caluroso 28 de Junio. Han pasado 6 meses y mi sobrino Miguel es todo un hombreton. La única pena que tengo es perderme el día a día, la distancia que nos separa me hace que no pueda disfrutar tanto de él como quisiera. Aun así, él no me extraño cuando me vio, aunque hacia casi 3 meses que no lo veía. Eso para mi es un alivio.
Desearos desde aquí Felices Fiesta y pediros por favor que me volváis a dejar los enlaces a vuestros blogs, por problemas tecnicos se me fue al garete mi antigua configuración y con ella todos vuestros enlaces. Pido perdón si no puedo seguiros, pero no se como encontraros.